miércoles, 15 de diciembre de 2010

Juegos electorales, ciudadanos arrasados

La cacería de “El más loco” o “Chayo” se conjugó con el escándalo mediático armado por el subalterno de la líder vitalicia magisterial sobre “La Tuta”; todo por un juego electoral, nada por la seguridad de la gente. El desafuero anunciado del diputado Godoy Toscano es otro elemento para apuntalar ese juego y la inseguridad de la gente.
Sigue reinando en Los Pinos el golpe mediático del fascista español, nacionalizado mexicano ipso facto, que fraguó la guerra que respaldó el fraude electoral de 2006. Las revelaciones de WikiLeaks corroboran el camino emprendido ilegítimamente, la ausencia de cordura, el imperativo de imponer y arrasar con la ciudadanía.
El panismo abusivo, autoritario, sin proyecto de nación y programa de gobierno, busca abrir paso al neocaciquismo familiar como sea, en medio de zonas arrasadas por la estructura policíaco-militar, ciudades bloqueadas y ciudadanos vulnerables y desprovistos de vida propia. La consigna es tener un cuerpo que exhibir para someter.
La lectura atenta de declaraciones, filtraciones, conferencias de prensa a modo, discursos que dan por hecho situaciones sin evidencias, dimes y diretes mediáticos sobre información que el de la voz debe conocer, pero usa abusivamente para culpar al otro, permite observar el entramado ideológico-político-electoral de la derecha.
El espaldarazo de Obama, presidente del imperio abusivo, evidenciado por sus propios comunicados, vapuleado por el electorado, reforma de salud bloqueada por la Suprema Corte estadounidense, e intentando la aprobación de la Dream Act, es noticia para la derecha panista, sus amigos y privilegiados.
Sin duda el peligro para México es el PAN, sus corifeos y gobernantes. Ante la falta de un programa de gobierno siguen aplicando las recetas fondomonetaristas y bancomunidalistas, muchas ya desechadas en el imperio, haciendo del país un territorio económicamente dependiente del ritmo de Estados Unidos y las transnacionales.
En cuanto a política interna, WikiLeaks es claro: el fascista Aznar duda de la cordura del “gobernante” mexicano al emprender la guerrita contra el narco, además de mostrar la desesperación por el “apoyo” estadounidense, lo que nos hace socios del antiterrorismo de Estados Unidos, que atiza la guerra en México para proteger su territorio y su gente.
Mientras, la pobreza sigue su curso ascendente; más de 50 millones de pobres están siendo administrados para volverlos consumidores con subsidios que no llevan a lo mismo, y el sistema educativo público en manos de la mafia elbista colapsa, aunque el uso del aparato burocrático es evidente para golpear gobiernos e imponer al panismo abusivo.
La presión guerrera continúa, pues el escenario buscado no acaba de imponerse. Las acusaciones contra funcionarios y servidores públicos fueron revertidas; el cerco mediático da tumbos frecuentes por las evidentes manipulaciones; las encuestas muestran a una opinión pública reacia a seguir apoyando sin cuestionamientos.
En este contexto se inscribe el ataque doloso a la revista Proceso. El trinomio Televisa-“gobierno”-PAN, buscan horadar una de las pocas lecturas abiertas, no oficialistas. Los privilegios, el abuso y la desinformación son compartidas por los tres actores sociales y políticos, buscando, no solo desprestigiar, golpear y arrasar.
Los juegos electorales, sustentados en la guerrita contra el narco, están arrasando las conciencias ciudadanas. Aunque no es problema de un estado, pues prácticamente en todo el país la ciudadanía vive sobresaltos cotidianos, tanto por parte de la delincuencia organizada como del sector gubernamental, el objetivo está puesto en una entidad.
En términos mediáticos, para el neocaciquismo familiar interesa nuestro estado para relanzar la campaña del odio y ocultar el fracaso de diez años de panismo que lo único que ha hecho es reproducir y mejorar la corrupción del régimen priista. El cambio y la transición no están en el juego de las elites políticas y económicas.
México es hoy más pobre, más desigual, más excluyente que hace diez años. A pesar de las supuestas cifras alegres de empleo y macroeconómicas que para lo único que sirven es para obtener más créditos fondomonetaristas, acrecentando la deuda pública a niveles nunca vistos. Ni siquiera el defensor del peso como perro manipuló y mintió tanto.
Obviedades. 1. El escritor sinaloense de novela negra y policíaca mexicana dice que la narcocultura florece porque el estado no puede generar iconos; parafraseándolo, creo que la basura televisa-azteca tampoco, pues únicamente inventa ídolos y estrellitas que viven del escándalo y de exhibir su vida privada, no del arte. Actualmente, esa narcocultura, sobre todo su parafernalia, deja huella, no tanto por la vida delincuencial, sino por la brillantez de sus objetos y sus formas ideológicas y culturales. En tanto, lo único que las supuestas “buenas conciencias” hacen es escandalizarse, condenar y reprimir, en lugar de diseñar e implementar políticas públicas que la contrarresten inteligentemente. 2. El SELA afirma que la migración calificada, lo que en otros términos se llama la fuga de cerebros, va creciendo en América Latina, implicando a 5 millones de personas. Esta pérdida de capital humano, sin lugar a dudas debería preocupar al “gobierno” y la sociedad mexicana, pero el primero está entretenido en su guerrita y en acabar con un gobierno democráticamente electo, y la segunda vive aterrorizada y alimenta ese éxodo. Esta migración, que combina flujos legales e indocumentados, también hace de México uno de los más importantes expulsores a nivel latinoamericano.