martes, 26 de febrero de 2013

Reforma migratoria, ¿integral y restrictiva? 3 y última

Afirma un funcionario del Instituto de los Mexicanos en el Exterior (IME), que el gobierno mexicano debe prepararse para el “cambio de paradigma” ante la eventual aprobación de una reforma migratoria, por los trámites administrativos que millones de indocumentados tendrían que realizar en México.
Miles, quizá millones, solicitarán algunos documentos (actas de nacimiento, matrimonio) para aspirar a la ciudadanía estadounidense, pero tal vez es muy temprano para tanta euforia. En su estado de la nación, Obama llamó a apresurar la reforma migratoria, pero la batalla apenas comienza.
Tanto senadores republicanos como demócratas, acordaron un mapa de ruta convergente con los planteamientos de Obama, pero la Cámara de Representantes está dominada por los republicanos, el Tea Party y algunos demócratas que valorarán mucho su voto en el momento preciso.
Como quiera, Estados Unidos está en un momento que puede hacer la diferencia ante un proceso migratorio que ha llevado a su territorio a millones de inmigrantes indocumentados, quienes históricamente han contribuido a la prosperidad de esa nación y la vigencia del llamado “american dream”.
Es claro que los indocumentados de origen mexicano podrían ser los mayores beneficiarios de la reforma migratoria; del total de indocumentados, el 60 por ciento son mexicanos. La probable obtención de la ciudadanía de 6.8 millones de mexicanos de seguro tendrá un impacto positivo entre la minoría latina.
Para nuestro país, significaría la pérdida de capital humano y social invaluable. Si bien la mayoría tiene baja escolaridad y se ubica en sectores de la economía estadounidense de baja calificación laboral, la opción de la ciudadanía privaría a México de un importante grupo de hombres y mujeres en edad productiva.
Asimismo, la reforma migratoria podría ofrecer un nuevo marco geopolítico y normativo al limitado programa de trabajadores huéspedes conocido como Visas H, particularmente el H2A para trabajadores agrícolas, definido básicamente por cuotas por país, y en el nuestro por estado.
La ampliación es apoyada por los sindicatos y los empresarios de Estados Unidos, los que, según The New York Times (02/07/13), inusitadamente están presentando un frente común, pues tanto la agricultura como algunos negocios, como los hoteles, requieren de importantes contingentes de trabajo estacional.
Igualmente, si valoramos el reciente estudio de Diálogo interamericano, la reforma migratoria podría acercar a México y Estados Unidos; desatar algunos nudos de otros problemas, y propiciar el estrechamiento de las relaciones económicas y bilaterales entre ambos países.
El reporte de Diálogo interamericano, un influyente think tank asentado en Washington, DC, cuenta con la colaboración de personajes como el ex presidente Ernesto Zedillo y el ex gobernador Lázaro Cárdenas Batel, y plantea un panorama extremadamente optimista.
La reforma migratoria, acorde con un documento filtrado a USA Today, el plan B del gobierno de Obama en caso de que las negociaciones en el Congreso estadounidense se estanquen, puntualiza la necesidad de otorgar la ciudadanía a millones de indocumentados en un lapso de ocho años.
Este planteamiento, según Diálogo interamericano, generaría un ambiente propicio para llevar a otro nivel la relación México-Estados Unidos, incluyendo un cambio de enfoque en la lucha antidrogas, además de que podría redefinir el alto potencial e influencia de los hispanos en ese contexto.
Acorde con lo anterior, la minoría latina, en la que destacan los de origen mexicano mayoritariamente, podría influenciar al gobierno estadounidense y la sociedad anglosajona para redefinir un trato diferente a México y losinmigrantes. El voto latino fue un factor fundamental en las pasadas elecciones.
Con todo, este optimismo desbordado ignora o desdeña las evidencias sobre las maneras en que los latinos, mexicanos y de otros orígenes, y según generaciones, se integran a Estados Unidos. Sigue pesando la sociedad transnacional, pero no es infinita, depende en mucho del capital social.
Pero insistimos en que este panorama tan positivo necesita la activa intervención del gobierno mexicano. El Senado mexicano ha definido un grupo de cabildeo al respecto, pero es necesario que la Presidencia de la República replantee su observación e intervenga con algo más que un beneplácito.
 
Obviedades. 1. En Cherán y otros pueblos del país, la autodefensa refleja desconfianza a la autoridad, hartazgo por la inseguridad, fracaso gubernamental para garantizar mínimos de seguridad a los ciudadanos, mientras en Morelia el presidente municipal minimiza con cierta retórica torcida (“nada más tres colonias han cerrado sus calles”) el activismo ciudadano, pero no observa las mantas alertando a los delincuentes y a otros vecinos de varias colonias organizándose contra la creciente y violenta inseguridad. Por supuesto que la solución no es cerrar calles, pero si no hacen su trabajo, qué les queda a los ciudadanos. 2. Es lamentable la trifulca mediática que el gobierno estatal actual lleva con la administración anterior: la deuda, la supuesta venta de unos terrenos, los litigios en la JLCA, la falta de pago a proveedores. Todo es importante y debe ser aclarado, pero debe haber asuntos más trascendentes para el estado que estas peleas callejeras. 3. El planteamiento de Bill Gates, el dueño de Microsoft, sobre la necesidad de centrar la educación en el alumno, no parece tan perversa; asienta que en nuestro país el docente tiene la más alta prioridad, lo que es verdad, pero le faltó agregar que los sindicatos, grupos y líderes que los pueblan, oficialistas y no, son los que realmente han secuestrado a estudiantes, docentes y la educación. 4. El tema de las remesas, abordado en el documento de Diálogo interamericano como potencialmente positivo en el contexto de la reforma migratoria, sigue reproduciendo la desacreditada opinión de su supuesto impacto en el desarrollo local, regional y nacional, cuando las evidencias empíricas sugieren lo contrario. Si los 6.8 millones de mexicanos consiguen la ciudadanía y se llevan a la familia, ¿a quién enviarían remesas? ¿No es evidente la contradicción? 5. Según la OCDE, las reformas estructurales son la panacea. Además de ser hoy más urgentes que nunca para la recuperación económica, supuestamente son “la herramienta” para promover el crecimiento económico, los empleos y el bienestar. Sugiere que aún en países con problemas, como Grecia y España, las reformas económicas auguran un reino absolutamente placentero.

miércoles, 13 de febrero de 2013

Reforma migratoria ¿integral y restrictiva? 2

Al inicio del primer mandato del presidente Obama, a pregunta expresa sobre la eventualidad de una reforma migratoria, este escribano contestó que no sería fácil e inmediata, en un contexto dominado por los republicanos extremistas, la política inmigratoria de Bush y la economía en caída.
Sin duda, estas situaciones han cambiado; unas se han profundizado negativamente, otras van entre tropezones. El segundo mandato de Obama inicia con temas urgentes, y el de la reforma migratoria ha generado un optimismo desbordado, sobre todo por las coincidencias entre antagonistas.
El contexto actual parece favorecer las convergencias, pero también las llamadas de atención. Al respecto, diversas organizaciones pro-inmigrantes y analistas destacan algunas dificultades y aspectos positivos de una reforma migratoria que deberá ser integral.
Por supuesto, la integralidad de la eventual reforma no necesariamente llegará a la amnistía, como en el caso de la IRCA (1986). La situación es profundamente compleja y diferente; además de que los antiinmigrantes buscan que no se repitan los efectos adversos de la reforma de Reagan.
La ciudadanía es fundamental para el presidente Obama para resolver, tanto el actual sistema migratorio fallido como la situación de millones de indocumentados, pero grupos pro-inmigrantes observan que el otorgamiento de la ciudadanía podría tomar una década, por las condiciones que implicaría.
Colorlines, un sitio web sobre raza, cultura y organización, señala ocho aspectos: a) la mitad de las familias indocumentadas tendrían que usar un tercio de sus ingresos para pagar las penalizaciones (diez mil dólares); b) de 3.6 a 5.8 millones podrían ser excluidos por no dominar el inglés.
Asimismo, c) millones podrían ser descartados por usar o poseer papeles falsos; d) cerca de 1.6 millones de inmigrantes podría quedar fuera por no cubrir los 5 años mínimos de residencia; e) más de un millón podría ser excluido por no poder probar tener un empleo (un tercio son mujeres).
Finalmente, f) 40 mil parejas del mismo sexo podrían ser descartadas debido al Acta de Defensa del Matrimonio; g) cientos o miles de deportados que regresaron clandestinamente podrían ser rechazados, y h) 400 mil prospectos podrían ser deportados este año según la política inmigratoria actual.
Por su parte, los republicanos exigieron, en la primera audiencia ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, que desean el reforzamiento de la política inmigratoria actual antes de firmar cualquier reforma. Este hecho podría implicar más detenciones, encarcelamientos y deportaciones.
En los últimos cuatro años 1.5 millones de inmigrantes fueron deportados. A detenidos y deportados se les niega el acceso a audiencia ante un juez, y muchas detenciones tienen un marcado perfil racial, afectando en particular a las minorías y las comunidades de inmigrantes (hispanos y mexicanos).
Asimismo, la violencia hacia los indocumentados ha alcanzado niveles intolerables. Acorde con datos de la EMIF de El Colegio de la Frontera Norte, el maltrato y la violencia de los agentes de la Patrulla Fronteriza va en aumento. El abuso tiene un claro perfil racial, discriminatorio y xenofóbico.
Esta situación se ha extendido a prácticamente todo Estados Unidos. Las redadas, arrestos y encarcelamientos son cada vez más violentos y se niega cualquier posibilidad a los detenidos en términos judiciales y de derechos, pues el fin principal es deportarlos, a veces por razones nimias.
Por ello, algunos grupos y abogados pro-inmigrantes afirman que el precio a pagar por una reforma migratoria que incluya la ciudadanía, será el reforzamiento y extensión de la actual política inmigratoria, pues a pesar de los abusos se pretende evitar lo sucedido con la reforma de Reagan (IRCA, 1986).
Sin embargo, se afirma, es un argumento simple y llanamente anti-inmigrante y anti-mexicano. Es propaganda discriminatoria y xenofóbica, pues ninguna medida será la “solución final” para impedir la porosidad de la frontera. En 2012 se gastaron 18 mil millones de dólares, ¿cuánto más se necesita?, preguntan.
Este contexto tenso y difícil, no invalida los aspectos positivos que podría tener la reforma migratoria. Parece que el debate llevará a mayores divisiones, no solamente en el Congreso de Estados Unidos sino también entre la sociedad estadounidense, por lo que es ahora o nunca.
Lo positivo de la reforma migratoria es de destacarse; a pesar de las restricciones, seguro incluirá temas, medidas y acciones que necesariamente favorezcan a la economía estadounidense. La mano de obra indocumentada es fundamental. En la próxima entrega abordaremos estos asuntos.
Obviedades. 1. Criminalizar a los desplazados por la violencia, la marginación, la pobreza y la precariedad persistente en diversas regiones del estado o de entidades vecinas, quienes arriban a Morelia y se asientan en colonias y cinturones de la miseria y la marginación urbana no es el enfoque más adecuado para enfrentar la inseguridad y la violencia. 2. El alegato de Mexicanos Primero, un grupo compuesto mayoritariamente por integrantes de la elite económica que tiene secuestrado a México, sobre la educación fallida en Michoacán y el país, tiene la única finalidad de hacerse de los recursos públicos destinados a la educación pública, violentar el principio constitucional del derecho a la educación pública, laica y gratuita, e imponer una visión eficientista y productivista a la educación; buscan imponer su visión oscurantista, neoliberal trasnochada y mercantilista. 3. Los panistas pos-Calderón dan pena ajena al auto declararse salvadores de la matria, cuando integrantes de su partido colaboraron activamente en el endeudamiento del estado y el desastre del país. 4. Siguiendo con los panistas, la iniciativa que promueven para regular marchas, plantones y en general las reuniones y movilizaciones de la gente, no sólo podría ser inconstitucional sino también es un monumento al fascismo, la persecución de la protesta, organización, y pretende desmovilizar a la sociedad civil. 5. Tanto a nivel nacional como en particular en Michoacán, los trastornos psicosociales se han agravado por la violencia. Una investigadora del Instituto Nacional de Psiquiatría, y el director del Hospital Psiquiátrico de Morelia, coinciden en que la sensación de injusticia, el incremento en el consumo de drogas y la situación de pobreza impulsan trastornos mentales como angustia, ansiedad, fobias que llevan a cuadros depresivos graves. Lo más alarmante es que, por un lado, del 80 por ciento de la población que padece estos cuadros únicamente 17 por ciento busca apoyo especializado, y por el otro, no existe, en Michoacán y en todo el país, una política pública integral al respecto.

miércoles, 6 de febrero de 2013

Reforma migratoria ¿integral y restrictiva?

En Estados Unidos, con la presentación de un acuerdo inicial entre congresistas demócratas y republicanos, y un discurso presidencial al día siguiente, se reabrió el camino que finalmente podría ser pavimentado por una reforma migratoria integral que corrija el sistema migratorio de ese país.
Pro-inmigrantes y antiinmigrantes coinciden en que el sistema migratorio estadounidense está roto desde hace por lo menos dos décadas, por lo que su reforma es urgente. En ambos casos también se plantea que la solución tiene que ser integral, pero con matices.
Los republicanos extremos y el Tea Party, privilegian un sistema migratorio restrictivo, el reforzamiento de las fronteras, particularmente la compartida con México, medidas severas para expulsar a los 12 millones de inmigrantes indocumentados, y leyes locales antiinmigrantes.
Por su parte, importantes demócratas, grupos y abogados pro-inmigrantes, favorecen normas que permitan otorgar la ciudadanía a los indocumentados, la ampliación de algunos programas de trabajadores huéspedes, restricciones a las leyes locales antiinmigrantes, y el reforzamiento del sistema migratorio.
Ambas posiciones, con matices de diverso tipo, deberán generar coincidencias para que a fines de este año esté lista una propuesta que, desde nuestra perspectiva, recogería la idea de la integralidad, pero también aspectos restrictivos, si tomamos en cuenta la política inmigratoria actual.
El otorgamiento de la ciudadanía podría tener múltiples filtros para quienes la soliciten, además de ponerlo en la fila que está precedida por cientos, quizás miles de solicitudes de inmigrantes que desean vivir en Estados Unidos y que han seguido los procedimientos acorde con la normatividad vigente.
Dicha situación podría abrir el camino a un esquema de inmigrantes de primera y segunda; los de primera serían los migrantes sin antecedentes, respetuosos de la normatividad, mientras los de segunda serían aquellos que ingresaron a territorio estadounidense violentando las leyes vigentes.
Otro aspecto restrictivo está relacionado con la política inmigratoria vigente. En el primer mandato de Obama, han sido deportados más de 350 mil migrantes anualmente. Adicionalmente, se reforzaron medidas que tienden a criminalizar a los indocumentados (redadas en las fábricas, comunidades seguras, etc.).
El descenso de la inmigración a Estados Unidos tiene un precio muy alto. Las deportaciones han tendido a limitar el ingreso de nuevos migrantes, pero su intención principal ha sido expulsar a los que califican como “indeseables”, con la finalidad de reducir el número de indocumentados a un número “manejable”.
Sin duda, esta política inmigratoria tiene una importante intencionalidad política, con la cual se llega a la discusión de la reforma migratoria como moneda de cambio para que los extremistas de derecha observen el “compromiso” de la administración de Obama por reparar el sistema migratorio roto.
Por supuesto que la reforma migratoria incluiría aspectos positivos. Es el caso de los “dreamers”, los familiares de los migrantes que esperan se acepte su solicitud, y la posibilidad de ampliar los programas de visas temporales, como el H2A, que lleva trabajadores agrícolas a Estados Unidos.
Es probable que, como ocurrió en la última década del siglo XX con la amnistía que impulsó la IRCA (1986), muchos indocumentados, al salir de las “sombras”, se incorporen a otros sectores laborales, lo que tendría implicaciones en el sector agrícola, por lo que un programa laboral agrícola será importante.
La reforma migratoria integral llevará en su base restricciones importantes. Podría reconocer a los más de 8 millones de mexicanos indocumentados como inmigrantes, no sólo como mano de obra barata sustituible, pero implicaría más condicionantes, pues se ubican entre los inmigrantes que rompieron la ley.
Ahora bien, lo lamentable es la simpleza de la postura del gobierno de Enrique Peña Nieto. Al parecer, se le ha recomendado saludar pero no participar activamente en el proceso. Como hasta la fecha, el papel de México será de observador, pues los migrantes mexicanos son simple mano de obra barata.
Obviedades. 1. La tragedia de PEMEX, cuyo saldo en muertos llegó a 37, seguirá dando pié a especulaciones, pues la supuesta acumulación de gas que los gobiernos federal y de la ciudad de México dicen fue el origen de la mortal explosión, no será suficiente explicación mientras el petróleo mexicano siga siendo ofertado a cualquier postor. 2. Es preocupante lo que parece está detrás del asesinato del encarga do de la presidencia municipal de Nahuatzen; además de otro funcionario, agregado a la ya larga lista de funcionarios ejecutados a nivel nacional, refleja la creciente inseguridad y el accionar sin límites del crimen organizado. 3. El conflicto en la UMSNH está rodeado también de múltiples desaciertos y desencuentros; unos heredados de administraciones pasadas y otros provocados por la impericia. En el sainete que busca confirmar privilegios inconfesables de un sindicalismo que ha perdido toda proporción, pierden los estudiantes y la institución. 4. Y las remesas cayeron de nuevo. De  4.4 por ciento fue la caída, la sexta baja mensual consecutiva. La principal causa es la lenta recuperación económica estadounidense, particularmente los sectores donde la mayoría de los indocumentados. La reducción anual quedó en 1.57 por ciento para 2012. 5. Y la “industria del crimen” sigue en ascenso: según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), las denuncias por secuestro crecieron en Tamaulipas, Michoacán y el Estado de México, aunque a nivel nacional tendieron a bajar.